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Douglas Josue y su "Lado A".

Actualizado: 12 may 2021


Entrevista a: Douglas Josué.

Proyecto: Douglas Josué.

Fotos: recopilación de artista.

Entrevista de La Selva Musical

Douglas Josué es un cantautor venezolano que se caracteriza por presentar un sonido fresco, cargado de rock y pop, que le dan un toque de originalidad a su música.


Influenciado por agrupaciones venezolanas como Dermis Tatu o Sentimiento Muerto pasando por Caifanes, Soda Stereo o Gustavo Cerati; hasta bandas americanas como los Stone Temple Pilots o Marillion. Su gusto por la música Étnica o Folclórica, hacen que su sonido sea original.


En estos momentos tiene 20 años en la industria musical, dos placas discográficas, la primera “Vuelvo a brillar” (2007) y la segunda “La Estampida” (2019)


Este 2021 presenta su tercera placa discográfica denominada “Doble Visión”. El disco está compuesto por 11 temas, que será lanzado en dos partes, Lado A y Lado B, dirigido a dos tipos de público.

En este sentido, el Lado A presenta temas de corte rock-pop y de corte balada-rock, tales como: “Pérdida”, “Directo al Corazón”, “Pesadilla”, “Hipnótica”, “Del Mar” y “Era Tan Fácil”; que se encuentran disponibles en todas las plataformas digitales.



¿Cómo Nació tu interés por la música?


Nació cuando tenía unos 12 años, empecé a estudiar en el ateneo de los Teques la ejecución de instrumentos propios de música folclórica venezolana: Cuatro, Arpa, Maracas… Después empecé a estudiar Guitarra Clásica y a partir de allí es que empiezo a hacer música, no de forma profesional sino como hobby.


En tu reseña nos cuentas que tus composiciones presentas un sonido fresco, cargado de Rock y Pop. háblanos un poco sobre eso.


Se puede decir que es Rock Pop, pero en lo personal no me gusta encajonarlo porque pienso que es una fusión de rock, pop, música en étnica folclórica.


Me di cuenta que había creado un estilo cuando estaba finalizando mi primera placa discográfica, en el en el año 2007, esta placa se titula "Vuelvo A Brillar" exactamente en el último tema fue que me di cuenta de que, sin buscarlo, había creado mi propio estilo y eso por supuesto representó un alivio para mí porque obviamente todos los músicos tienen referencias musicales.


Aunque tampoco es que puedo decir que yo estaba buscando parecerme o no parecerme a alguien en específico, porque no estaba buscando nada, lo que quería era expresarme musicalmente.


Toma tiempo tener un estilo, “mucha gente piensa que se le da nombre a la música y hay diversos tipos, pero si se toma tiempo crear un estilo propio y fue la misma música que me marcó el tiempo”. Después de eso empecé a componer en base de mi propio estilo y mi percepción de la música.


¿Qué te impulso a inclinarte a por esta vertiente musical?


Yo siempre he pensado que la música es expansible que se puede estirar como una liga, es decir, siempre se pueden incluir más estilos musicales. en mi caso todo concluye en el rock.


Lo que me impulso a inclinarme en este estilo musical fue el poder que, en general, tiene la música sobre las personas como: viajar a los recuerdos con una pieza musical y otras que pueden identificarse y hasta llorar cuando escucha una canción.


Entonces cuando yo vi esa situación con la música entendí el poder que tiene, sobre todo la buena música, que hay que pensarla tanto la melodía como la composición de las letras, la estructura de la canción, todo eso hay que pensarlo muy bien para que de alguna u otra manera pueda causar un efecto.


Mi meta es trascender, yo opino que hay que ahora hay mucha música sin contenido vacía que no te dice nada y yo vengo a rescatar un poco de eso, la música con concepto, con contenido.


Bueno como te dije ahorita hay muchísima música, pero para mí, esa es música que no tiene ningún sentido, ninguna dirección en una visión de nada.


Es como música momento. La gente la escucha, la disfruta y después se le olvida, ni se acuerda después de la letra. Lo que decía, que no tiene trascendencia, contenido, no hay un sentido de la letra y mucho menos en la melodía. Entonces yo me enfocó mucho en eso en la parte estética de la música.





¿Cómo ha sido ese cambio del medio musical venezolano al medio musical ecuatoriano?


El cambio no ha sido tan drástico porque, si, aquí en Ecuador hay mucha música independiente o música INDIE, pero igual.

“Me pasa algo muy curioso, ahora, cuando escucho una banda nueva o que está empezando, los escucho como si tuviera unos niños de cinco años tocando unas guitarras. Porque no le encuentro un sentido, tampoco una estética y obviamente no me llama la atención y termino no escuchando o escuchando si ofrece algo, pero sino le encuentro nada ahí lo dejo.”

Por lo menos aquí en Ecuador el público está en una etapa muy Underground y el apoyo de los medios, en cuanto a la difusión, cuesta bastante. Porque no hay diferentes portales Web, como en Venezuela, dedicados a la música y eso como que retrasa la cosa.


Además de que aquí todavía hay un público muy amante del metal, que también es chévere porque tiene seguidores muy fieles, pero tampoco como que expresa nada, porque es mas de lo mismo.


¿Cómo te ha recibido el público ecuatoriano?


El público ecuatoriano ha recibido muy bien esta propuesta musical. Gracias a Dios, la gente que escucha el disco o escucha las canciones, se identifica y sobre todo me dicen “me gusta mucho, no puedo dejar de escucharlo.”


Entonces, musicalmente pienso que se está cumpliendo la meta, que es que agrade y que perdure en el tiempo.


¿Consideras que te ha costado entrar al mercado musical de ecuador?


No lo veo de esa manera, porque la música está muy accesible, están todas las redes sociales, las plataformas digitales…


Específicamente en ecuador la cosa va poco a poco. Pero, como te digo, no creo que la cosa sea solo ecuador, porque tengo bastante público en Chile, México, España, les gusta bastante mi música y eso es un alivio para mí.


Gracias a que hay muchas plataformas la muisca puede expandirse rápidamente y llegar a las personas que les gusta este tipo de propuesta musical.

En todos estos años que tienes de trayectoria musical ¿Cómo han sido tus experiencias en tarima? (Buenas y malas)


Gracias a Dios han sido buenas. No te puedo decir que me haya ido mal en alguna tarima, lo único que pienso que hay y eso pasa en todas partes, es que existen diferentes tipos de público.


Hay públicos que puede ser que te aplaudan, como hay otros que simplemente van a escuchar la música y no te aplauden a ti ni a nadie. Forma parte de hacer conciertos, puede ser que estés con los ánimos en lo alto y aun así el público no responda, entonces hay que verlos con gran respeto porque o te matan o te eleva de una vez al cielo.


Sin embargo, suele pasar también que haces un tema musical y no te gusta a ti pero le gusta a la gente, así como también, hay temas que tú piensas que van a funcionar y no funcionan porque la gente no responde. Es como una caja de pandora, tu sientes que pueden servir varios temas, pero pasa todo lo contrario.


¿Cómo fue grabar tu nueva placa discográfica “Doble visión”? cuéntanos un poco sobre el "Lado A".


El proceso de composición lo hice en durante la cuarentena, en agosto del 2020, estaba realizando este trabajo.


“Mientras había gente desesperada por el asunto de esta pandemia, yo estaba componiendo.” No quise desperdiciar el tiempo porque me pareció el momento perfecto para hacer, había calma y no tenía excusas para decir que no podía porque fue muchísimo tiempo. Así que me concentre en hacer los 11 temas que están en el disco.


Y bueno, el “Lado A” de “Doble Visión” representa un cambio musical, para mí, en relación con mis trabajos anteriores. Lo siento de esa manera porque al momento de componer fue todo un “rio de creatividad”.

Estoy muy contento porque la poca gente que lo ha escuchado (que lo lance el 26 de marzo) me ha dicho que le ha encantado.


…Y ¿Cómo ha sido trabajar en Alexa Records?


El sello discográfico ha sido fabuloso, porque en ningún momento ellos me presionaron para nada. Yo tuve la libertad de hacerlo a mi tiempo grababa, me tardaba… pienso que la calidad de los temas que compuse se debe precisamente a eso, a que tenía el tiempo y no había presión.


“No había la presión de decir –¡lo compongo mañana! O ¡Grabo mañana! O déjame arreglar esto aquí o quiero hacer otra cosa, pero no me da tiempo- no, no había nada, porque el tiempo que Dios dio, para mí, en la cuarentena y en general, me resulto estupendo.
Fue como si el planeta dijera – Ok ¡todo el mundo para su casa! Yo quiero descansar un rato.”

Trabajar en Alexa Records fue como estar en una nube, lo que me permitió pensar más las melodías, las letras y organizar mejor los arreglos musicales. En ese punto yo hice todo solo el bajo, la batería, guitarras, teclados, arreglos, porque obviamente no tenía los músicos conmigo por esto de la pandemia.

No me arrepiento, ya lo he hecho otras veces, pero me fuese encantado tener a los músicos conmigo en el momento de la composición porque eso hubiese enriquecido mas el trabajo.


¿Qué consejo le darías a todos aquellos músicos con proyectos nuevos o de trayectoria que han emigrado o quieren emigrar?


“Que le echen ganas, eso es todo.”

Que creen propuestas nuevas, porque eso es lo más interesante de la música, que busquen su propio estilo, que salgan a la luz y dejen el miedo porque la música es muy universal y quizás lo que a ti no te guste o pienses que estás haciendo mal a otra persona le va a gustar.


¿Qué podemos esperar de este proyecto en un futuro cercano?


Por ahora, disfruten este “Lado A” que está disponible en todas las plataformas digitales y, se viene un “Lado B” en el que, actualmente, me encuentro trabajando, que también se va a estrenar este año “no puedo decir nada, ni fecha de cuándo, pero, eso viene.”


Agradezco al público, su fidelidad a través de los años. Le agradezco a la gente que escucha mi música y se dedica a escuchar la propuesta que es lo más importante para mí.




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